Wednesday, 25 March 2015

El francotirador (Crítica)

Título: El francotirador
Título original: American sniper
Duración: 132 min
Director: Clint Eastwood
Reparto: Bradley Cooper, Sienna Miller
Sinopsis: la película narra la vida de Chris Kyle, el francotirador más letal de la Historia de los Estados Unidos...










"Hice lo que tenía que hacer"
Chris Kyle

Ahora que se estrena esta película y recordamos las intervenciones, los despliegues y un largo etcétera, es cuando, una vez más, surge la controversia. Esta vez tiene a un hombre como centro: Chris Kyle, que cuenta con más de 150 bajas confirmadas (más aún si contamos aquellas de las que no se recuperaron los cuerpos) durante la intervención en Afganistán.
La historia de Kyle ya fue narrada en su autobiografía, en la que se basa esta película y no fue hasta que Clint se fijó en ella que yo la conocí.
Estés a favor o en contra del personaje, es algo tremendamente cierto para mí que nos encontramos ante otra de las maravillas de Eastwood y la última (por el momento) en unirse a esas maravillas que son Gran Torino, Invictus y Más allá de la vida. Desgraciadamente, aún me queda Jersey boys.
El film tiene varias cosas que resultan en geniales tales como la cámara, que en algunos momentos resulta vital y que siempre mete en la acción. Algunas escenas (nombraré una con tormenta de arena) son sencillamente increíbles, al igual que el resto de escenas de acción.
Estas escenas se intercalan con la vida diaria del Seal en su país con su mujer e hijos, la cual resulta tremendamente importante de cara a entender la profundidad psicológica del personaje.
Eastwood no nos quiere presentar a alguien perfecto sino a alguien patriota, con todo (bueno o malo) lo que puede acarrear.
Personalmente encuentro algo más interesante el planteamiento de que nunca llegas a volver de la guerra (Fury ya se encargó de dejarnos bien clarito ese tema) y de que, una vez has combatido, es algo que te marca de por vida. Realmente es ese el aspecto que Clint más explota y con muy buen tino, debo decir.
Y es que la película nunca, y repito, nunca, intenta presentar a Kyle como un héroe americano totalmente perfecto, sino que coge a un personaje que ha resultado importante en esa guerra y le da un rostro a un ejército y a aquellos que volvieron de él y se sintieron fuera de lugar al volver.
Los efectos especiales dejan paso a los visuales, y es que el presupuesto se lo han pulido ahí. Madre mía, que ambientación por favor, realmente inmersiva. Tremenda.
La BSO es algo que quizá se quede algo más bajo pero no reduce el nivel general. Puede que en un revisionado (que lo tendrá, si no es en cine, en casa) cambie mi opinión sobre esto.
Las actuaciones son, a mi modo de ver, portentosas:
Para empezar tenemos a ese, ahora sí, buen actor que es Bradley Cooper. Ya me dio una sorpresilla en la notable El lado bueno de las cosas, pero es aquí donde demuestra que puede cambiar de repertorio, no ser únicamente un personaje intercambiable como era al principio de su carrera y, realmente, demostrar que sabe hacer las cosas bien. Un Chris Kyle insuperable.
Sienna Miller en el primer papel real y serio que le veo (hasta ahora la aparición más notable que le había visto era en G.I. Joe así que tampoco es que tuviera muchas referencias). Decir que, aunque está perfecta en su papel, que lo está, es cierto que queda enmascarada por Cooper, dado que él acapara el grueso de la película (tiene un protagonista y solo uno).
No diré mucho más, salvo mencionar que el último momento de la peli, te deja pegado a la butaca, y que Clint Eastwood siga teniendo esa calidad, después de tanto tiempo, es de ser un gran director... Y no hay más.


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