Sunday, 25 October 2015

Marte-The martian (Crítica)

Título: Marte (The martian)
Título original: The martian
Duración: 142 min
Director: Ridley Scott
Reparto: Matt Damon, Jessica Chastain, Chiwetel Ejiofor.
Sinopsis: Mark Watney es dado por muerto en Marte, pero no ha sido así. Con ayuda de su ingeio debera sobrevivir y encontrar un modo de contactarse con la Tierra...








"Técnicamente, he colonizado Marte... Toma ya Neil Armstrong"
Mark Watney

Me moría de ganas de ver la nueva película de Ridley Scott, pero no por él, que con los disgustos que nos pega últimamente (ejem ejem Exodus ejem ejem)... Le tenía ganas porque el libro en el que se basa es magnífico. Para mí es uno de los mejores que he leído. Así de claro.
La eterna pregunta es, ¿le hace justicia la película al libro? Sí. ¿Es tan buena como él? No, pero como adaptación, me parece insuperable.
Se suele juzgar una adaptación en función de lo que se asemeja al material del que proviene, pero nunca se tiene en cuenta el importante tema de que un libro no es una película y no pueden ser tratados del mismo modo.
Hay muchas cosas que Marte omite del libro, pero no está mal. Al contrario, si con lo que dura ya tiene bastante, y no aburre en ningún momento.
Lo cierto es que Marte es cine de aventuras del que ya no se hace, como se suele decir.

Cuando uno ve una película como Gravity lo pasa mal, siente el agobio del espacio y la soledad. Cuando uno ve Interstellar piensa en cosas más profundas, más allá del ser humano, del amor... Pero cuando uno ve Marte, simplemente piensa en la aventura de alguien atrapado. Voy a pecar de repetitivo (lo dice todo el mundo) y afirmar que esta película es el Robinson Crusoe de nuestra época.
Vayamos por partes:
Tenemos un reparto que se sale por los cuatro costados. Arriba no los he puesto a todos porque me ocuparían media crítica, pero la película ya merece vuestra atención solo por el reparto.
Evidentemente, la estrella es un increíble Matt Damon, con su mejor interpretación hasta la fecha. Su Mark Watney se estudiará en las escuelas de cine a la hora de crear aventureros. Un personaje que siente y padece, pero con un carácter que no se regodea en su situación.
¿Es exagerado? Sí, pero que más dará. La película nunca siente la necesidad de destacar su soledad o cosas así, simplemente es más despreocupada. Y aún con eso, tiene los mejores momentos dramáticos que hayamos podido ver a Damon en toda su carrera. Magistral.
El resto es secundario. Son secundarios de lujo, en concreto Ejiofor y Chastain, pero no pasan de eso. No están desaprovechados y los llegas a conocer a todos en mayor o menor medida, pero no son "intercambiables".
Los efectos especiales son perfectos pero muy poco utilizados. Este año tenemos ya varias películas que no abusan de efectos especiales y potencian los visuales, tales como la cuarta entrega de Mad Max o Vengadores: La era de Ultrón (que tiene mucha más cantidad de efectos visuales de los que podáis pensar en un principio, os lo aseguro). La película no se centra en ello porque no lo necesita, y eso es lo que ayuda a que sea más de aventuras y menos "de explosiones".
Además, se aprecia un ritmo trepidante pero más pausado. Nos dejan tiempo para conocer al bueno de Watney, para que nos explique su situación, sus invenciones o sus bromas. Damon construye un personaje entrañable del cual realmente te preocupas y quieres que sobreviva, y eso hablando solo consigo mismo. Casi nada.
La cámara es muy, muy buena. Consigue resaltar la soledad en muchas panorámicas del planeta rojo pero no crea agobio.
Y eso, ¿cómo se logra? Con una animada banda sonora y una enloquecida lista de canciones (culpa de la comandante Lewis) basada en éxitos del disco que por poco matan a nuestro astronauta. Puede que no peguen ni con cola pero me da igual. Me han sacado una sonrisa en varias ocasiones (cuando pone Hot stuff en el coche y "baila", sublime).
La dirección es cumplidora, pero lo bueno de ella es que es impersonal. Es posible que Scott hubiera querido hacer un relato épico u oscuro, pero se fía del criterio de los demás (el guionista, por ejemplo) y se limita a hacer lo que tiene que hacer.
No voy a desvelar nada de lo que sucede en ninguno de los tres argumentos que hay (la Tierra, la Hermes y Marte) porque es mejor que lo descubráis vosotros, pero sorprende a cada minuto (y eso que yo me he leído el libro).
Un último aspecto a mencionar es el magnífico sentido del humor que tiene todo el metraje. No se excede, ni requiere de chistes pasados de vueltas para hacer reír al espectador. Todos están en el momento preciso. Mención aparte y de honor merece la alusión de Sean Bean a su película más conocida...
Lo mejor de esto es que, aún con la elevada dosis de humor sigue sin perder la sensación de realismo e importancia que necesita. En esto la película consigue un equilibrio entre humor y seriedad perfecto.
No se me ocurre que más deciros para que la veáis. Marte es una maravillosa película de aventuras de las de toda la vida para toda la familia (aunque los más mayores puede que la disfruten más), con una cámara, unas actuaciones, una banda sonora, un sentido del humor y un ritmo insuperables. Es posible que sea la mejor película del año, junto a Inside out y (esperemos) Star Wars: El despertar de la fuerza.


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