Título: Acero puro
Título original: Real steel
Duración: 126 min
Director: Shawn Levy
Reparto: Hugh Jackman, Dakota Goyo, Evangeline Lilly, Kevin Durand, Anthonie Mackie.
Sinopsis: año 2020. Los robots han sustituído a las personas en el boxeo. Charlie Kenton trata de sobrevivir en el mundo de los combates de robots cuando se ve obligado a cuidar de su hijo.
"Se llama Atom"
Max Kenton
Una película que hace unos años se estrenó y que firmaba Shawn Levy, anunciada como una película de robots boxeadores.
En fin, la verdad es que desde el principio no me creí que Levy (director de películas amables como Noche en el museo, que me gustó mucho y La pantera rosa, que empeoró en la segunda entrega) hubiera hecho una película de acción pura y dura. Simplemente era imposible.
Reconozco que la presencia de Spielberg en producción me hizo confíar algo más pero bueno, tampoco iba con unas grandes expectativas.
Es lo bueno de ir al cine así, que te puedes sorprender.
La película, además de entretenida, transmite más de una enseñanza que no están de más y presenta a personajes con problemas y humanizados.
Para empezar tenemos al siempre simpático y buen actor Hugh Jackman encabezando el reparto y creyendo todo lo que dice. Según él, fue de gran ayuda las maquetas a escala real que se hicieron para la actuación. En los momentos en que no están en el ring o moviéndose en exceso, los robots son reales.
Dakota Goyo aparece después de que le viéramos fugazmente en Thor, aunque aquí es principal y se defiende en su personaje.
Evangeline Lilly es una buena actriz, ya no se puede negar. Si en esta hace un papel un poco más cortado porque simplemente no tiene más posibilidades y aún así logra mejorarlo mucho. En El hobbit 2 se la ve mucho mejor.
Un punto muy positivo es el realismo de los robots: no tienen fallos. Los combates, además de espectaculares, están fantásticamente realizados, de manera que el robot es real para nosotros.
El hecho de que quieras dotar de vida a una película de ciencia ficción honra al director y además es que lo hace con tan buen tino que la relación padre e hijo se convierte en lo más simpático de la cinta.
Por otro lado, una cosa no quita la otra: me parece una explicación más que convincente la que se nos da para los robots boxeadores: queríamos más violencia y el ser humano no aguantaba.
Bien trabajado ese punto además de que los escenarios son realistas. Aún siendo una película que los niños disfrutarán (los adultos como niños) se aprecian detalles algo más escondidos como en ese sitio llamado el Zoo, con la gente bebiendo aunque algo camuflados. Muy interesante esa manera de dar al público más mayor algo que llame la atención.
Los combates, habiendo hablado ya del realismo, son espectaculares. Los robots se mueven de un lado al otro a cada cual más espectacular (el de dos cabezas despertó a mi niño interior, ahora en guardia con la inminente Los Vengadores: La era de Ultrón). La grabación hace que no sea confuso ni nada por el estilo y esas dos horas se pasan volando.
Destaca el combate final, muy tenso y entretenido y que consigue hacernos pasar por lo que quiere, es decir, momentos de tensión y la pregunta de qué pasará.
Respecto al final, decir que estoy de acuerdo, aunque beba de otras películas del género, en concreto de la saga Rocky.
Con muchos aciertos, y apenas fallos, esta película familar es excelente y la disfutará toda la familia.
Título original: Real steel
Duración: 126 min
Director: Shawn Levy
Reparto: Hugh Jackman, Dakota Goyo, Evangeline Lilly, Kevin Durand, Anthonie Mackie.
Sinopsis: año 2020. Los robots han sustituído a las personas en el boxeo. Charlie Kenton trata de sobrevivir en el mundo de los combates de robots cuando se ve obligado a cuidar de su hijo.
"Se llama Atom"
Max Kenton
Una película que hace unos años se estrenó y que firmaba Shawn Levy, anunciada como una película de robots boxeadores.
En fin, la verdad es que desde el principio no me creí que Levy (director de películas amables como Noche en el museo, que me gustó mucho y La pantera rosa, que empeoró en la segunda entrega) hubiera hecho una película de acción pura y dura. Simplemente era imposible.
Reconozco que la presencia de Spielberg en producción me hizo confíar algo más pero bueno, tampoco iba con unas grandes expectativas.
Es lo bueno de ir al cine así, que te puedes sorprender.
La película, además de entretenida, transmite más de una enseñanza que no están de más y presenta a personajes con problemas y humanizados.
Para empezar tenemos al siempre simpático y buen actor Hugh Jackman encabezando el reparto y creyendo todo lo que dice. Según él, fue de gran ayuda las maquetas a escala real que se hicieron para la actuación. En los momentos en que no están en el ring o moviéndose en exceso, los robots son reales.
Dakota Goyo aparece después de que le viéramos fugazmente en Thor, aunque aquí es principal y se defiende en su personaje.
Evangeline Lilly es una buena actriz, ya no se puede negar. Si en esta hace un papel un poco más cortado porque simplemente no tiene más posibilidades y aún así logra mejorarlo mucho. En El hobbit 2 se la ve mucho mejor.
Un punto muy positivo es el realismo de los robots: no tienen fallos. Los combates, además de espectaculares, están fantásticamente realizados, de manera que el robot es real para nosotros.
El hecho de que quieras dotar de vida a una película de ciencia ficción honra al director y además es que lo hace con tan buen tino que la relación padre e hijo se convierte en lo más simpático de la cinta.
Por otro lado, una cosa no quita la otra: me parece una explicación más que convincente la que se nos da para los robots boxeadores: queríamos más violencia y el ser humano no aguantaba.
Bien trabajado ese punto además de que los escenarios son realistas. Aún siendo una película que los niños disfrutarán (los adultos como niños) se aprecian detalles algo más escondidos como en ese sitio llamado el Zoo, con la gente bebiendo aunque algo camuflados. Muy interesante esa manera de dar al público más mayor algo que llame la atención.
Los combates, habiendo hablado ya del realismo, son espectaculares. Los robots se mueven de un lado al otro a cada cual más espectacular (el de dos cabezas despertó a mi niño interior, ahora en guardia con la inminente Los Vengadores: La era de Ultrón). La grabación hace que no sea confuso ni nada por el estilo y esas dos horas se pasan volando.
Destaca el combate final, muy tenso y entretenido y que consigue hacernos pasar por lo que quiere, es decir, momentos de tensión y la pregunta de qué pasará.
Respecto al final, decir que estoy de acuerdo, aunque beba de otras películas del género, en concreto de la saga Rocky.
Con muchos aciertos, y apenas fallos, esta película familar es excelente y la disfutará toda la familia.
EmoticonEmoticon